
06 Abr 3 claves para evitar la sobreinformación en los Sistemas de Control
La función principal de un sistema de control y supervisión, basado en un SCADA, es la de gestionar y administrar de forma eficiente un equipamiento o instalación. Para ello es preciso disponer de la información necesaria en el momento justo, lo que permitirá tomar las decisiones adecuadas para el correcto funcionamiento del sistema. En muchas instalaciones, esta información se recibe en tiempo real y se debe presentar de forma clara a los operadores, simplificando su comprensión y permitiendo la identificación rápida de situaciones críticas que requieren atención. ¿Qué ocurre cuando recibimos un exceso de información? En este artículo daremos, precisamente, 3 claves para evitar la sobreinformación en los Sistemas de Control.
¿Qué es la sobreinformación?
La sobreinformación, o desinformación por exceso de información, es el fenómeno que dificulta la toma decisiones adecuadas y consistentes, en un momento determinado, debido a la disponibilidad de demasiada información. El exceso de información se caracteriza por la acumulación de datos, que en muchos casos presentan información incompleta, irrelevante, redundante o inconsistente, sobre la que es necesario realizar un proceso de análisis y depuración, conocido como “curación de la información”, que requiere de un esfuerzo considerable para transformar este conjunto de datos en información relevante y de calidad, que nos permita tomar decisiones correctas y a tiempo.
3 claves para evitar la sobreinformación en los Sistemas de Control
En el diseño de un sistema de control y supervisión, entre otros muchos aspectos a tener en cuenta, es muy importante reducir la posibilidad de sobreinformación que pueda percibir un operador. En este sentido hay algunas buenas prácticas a considerar:
1. Elaboración de un Plan de Información
En la fase de diseño es interesante la realización de un “plan de información”, que es un documento donde se analiza la información accesible, la información requerida por el sistema de control, el tratamiento y el uso que se quiere dar a esta información. Este documento, además, permitirá clasificar la información por su criticidad e importancia, determinar si se trata de alarmas o eventos, si se debe mostrar en tiempo real o si se debe historizar. En base a esta información se podrá diseñar el sistema de forma más eficiente.
2. Gestión de Alarmas
Las alarmas son uno de los elementos más importantes en la gestión de los sistemas de control. Algunos aspectos a tener en cuenta son:
- Es preciso realizar una buena clasificación de alarmas por nivel de criticidad y afectación a los sistemas. Es aconsejable no disponer de más de 5 niveles de criticidad, lo que permite simplificar la clasificación de alarmas y la interpretación de cada uno de los niveles.
- La descripción de las alarmas debe ser clara, autodescriptiva y que permita comprender la naturaleza de la misma, evitando que se conviertan en un conjunto de abreviaturas ininteligibles. Este es un factor importante de desinformación. Además es importante establecer y respetar un único criterio en cuanto a las descripciones y que este se cumpla para todas las casos, como por ejemplo utilizar las mismas abreviaturas o mantener constante la estructura de la descripción.
- Es aconsejable evitar el uso de demasiados colores para la visualización de alarmas de distinta criticidad, puesto que puede dar lugar a confusiones con otro tipo de estados o representaciones. Es preferible utilizar el color rojo exclusivamente para indicar situaciones de alarma o de peligro y utilizar otros mecanismos para diferenciar las alarmas y su estado, como por ejemplo el blinking.
- La visualización de las alarmas en tiempo real debe limitarse a las alarmas de mayor nivel o que presenten afectación a la operación del sistema, evitando las alarmas de baja criticidad que por lo general son bastante frecuentes y no revisten gravedad, siendo básicamente informativas. De este modo se centra la atención en las alarmas relevantes y se evita tener un volumen elevado de alarmas activas de diversas criticidades que puede dificultar la atención a las alarmas realmente importantes.
- Es importante disponer visores y mecanismos de filtrado que permitan seleccionar qué alarmas se muestran en cada momento. La información de las alarmas de baja criticidad puede ser de importancia para un análisis posterior como la detección de patrones de comportamiento de los dispositivos, pero no son adecuados para la visualización en tiempo real.
3. Usabilidad de la Interfaz gráfica
La interfaz gráfica de los sistemas de control es el elemento principal de presentación de la información y de supervisión del sistema para los operadores. Tan importante es, en un sistema de control, disponer de la información de campo como presentarla de forma adecuada para permitir la gestión de los sistemas. Con el fin de facilitar la comprensión de la información mostrada es importante respetar los siguientes principios:
- Establecer un criterio de navegación, coloración y animaciones único para todo el sistema, de modo que un mismo color signifique lo mismo en todos los sinópticos o que el acceso a opciones asociadas a los elementos se realice del mismo modo.
- Presentar información real y de calidad, e indicar claramente si la información puede no ser válida. Por ejemplo, durante la pérdida de conexión física con un dispositivo, si se muestra la última información disponible ésta puede no estar vigente.
- Evitar los sinópticos densos, con un elevado número de elementos en pantalla con diversa información numérica asociada. Es preferible establecer diversos niveles de detalle, de modo que en los niveles más elevados se presente información básicamente visual referente a los estados de los elementos y alguna información numérica relevante. Esta información puede visualizarse mediante tooltips, evitando así la sobrecarga de los sinópticos. A partir del nivel superior, se accede a pantallas de detalle donde se muestre toda la información relativa a los dispositivos.
- La información crítica debe estar siempre visible. Ante situaciones que requieran de la atención de los operadores, el sistema debe notificar esa condición, priorizando la presentación de los elementos clave por delante de cualquier otra visualización. En otras palabras, una situación crítica no puede pasar inadvertida porque el operador no se encuentre en la pantalla adecuada en el momento de la incidencia.
En el siguiente artículo plantearemos algunas funcionalidades de ayuda a la explotación que permiten reducir la sobreinformación en los Sistemas de Control.