En la actualidad, la evolución de los sistemas de control y las comunicaciones han permitido el acceso a grandes volúmenes de información que, junto con tecnologías emergentes como Internet of Things (IoT), Big Data y Business Intelligence, abren un amplio abanico de nuevas posibilidades. Estas tecnologías se basan en la extracción de información de cantidades ingentes de datos, mediante su tratamiento y curación, permitiendo identificar patrones o cruzar datos y llegar a conclusiones a las que hasta ahora no era posible acceder.

La función principal de un sistema de control y supervisión, basado en un SCADA, es la de gestionar y administrar de forma eficiente un equipamiento o instalación. Para ello es preciso disponer de la información necesaria en el momento justo, lo que permitirá tomar las decisiones adecuadas para el correcto funcionamiento del sistema. En muchas instalaciones, esta información se recibe en tiempo real y se debe presentar de forma clara a los operadores, simplificando su comprensión y permitiendo la identificación rápida de situaciones críticas que requieren atención. ¿Qué ocurre cuando recibimos un exceso de información? En este artículo daremos, precisamente, 3 claves para evitar la sobreinformación en los Sistemas de Control. 

El desarrollo de sistemas de control y supervisión ha evolucionado en los últimos veinte años adaptando las tendencias, paradigmas y metodologías del entorno de las Tecnologías de la Información. En el ámbito industrial, la adopción de nuevas tendencias siempre ha ido un paso por detrás respecto a los sistemas de TI tradicionales debido, en gran medida, a que únicamente se asimilan cuando disponen del grado de madurez que garantiza el correcto funcionamiento.