
05 Jul La digitalización ayuda a conseguir empresas más rentables y sostenibles
- La tecnología avanza tan rápido que a las fábricas les resulta difícil estar siempre a la última en materia de innovación. Las empresas que no quieren perder el tren de la digitalización se han visto obligadas a redefinir sus modelos de negocio para encajar en el sistema de la economía digital y ahora son organizaciones inteligentes y mucho más eficientes.
- En un mundo en plena transformación, nos gusta hablar de evolución sostenible y le damos también la bienvenida a la Industria 5.0.
- En Oasys somos expertos en soluciones para la transformación digital industrial. Preparamos a las empresas para la digitalización de la Industria 4.0 y mejoramos sus procesos productivos.
¿Están las empresas actuales concienciadas con el hecho de que la industria 4.0 y la 5.0 han llegado para quedarse y deben invertir, si no lo han hecho ya, para adaptarse a los tiempos?
Es cierto, la Industria 4.0 ha llegado para quedarse. Las organizaciones empresariales saben que si no mejoran sus procesos mediante la digitalización perderán irremediablemente competitividad y eso las llevará a su extinción. Todas las empresas deben poder dar el salto, cada una en la medida de sus posibilidades y de manera económicamente sostenible, a una mejora de la eficiencia que pasa con toda seguridad por la digitalización, es decir, lo que llamamos de forma genérica Industria 4.0.
Así como entre las anteriores revoluciones industriales (introducción de la producción mecánica, de la electricidad y de la producción en serie e introducción de la microelectrónica y las primeras tecnologías de la información) ha habido un salto temporal considerable, el salto entre la Industria 4.0 y la Industria 5.0 va a ser continuo, gradual e imperceptible debido a la imparable aceleración del avance tecnológico.
¿Debemos hablar de evolución o revolución?
Nosotros creemos que siempre se trata de una evolución. A partir de nuestra propia experiencia, los cambios siempre se desarrollan sobre una base existente que trata de mejorar de forma gradual. El mundo empresarial es conservador por naturaleza y siempre se construye y se evoluciona sobre algo que ya funciona. También hay que contar con el factor humano que, por naturaleza, es siempre resistente a los cambios que deben ser introducidos paulatinamente para que sean aceptados y puedan asimilarse y afianzarse.
El coste de los cambios depende del sector de actividad, pero ¿existe una estimación media de cuánto puede costar la adaptación a la nueva forma de fabricar o la introducción de los cambios que mencionáis?
Evidentemente cada empresa es diferente pero, bajo nuestro punto de vista, la implantación de mejoras relacionadas con la digitalización deberá ser consecuente con la economía de cada empresa. Esto quiere decir que deberá realizarse siempre analizando los posibles riesgos, que también los hay, y teniendo en cuenta parámetros como el retorno de la inversión, el incremento de la productividad etc., para analizar el impacto que tendrá en la cuenta de resultados de cada empresa.
¿Qué papel desempeñan la eficiencia y la sostenibilidad en esta nueva forma de fabricar?
Todo se basa en incrementar la productividad de los procesos y, a estas alturas, ya no queda tanto margen de maniobra. En consecuencia, uno de los caminos a seguir es mejorar sensiblemente la eficiencia. Esto significa que deberá producirse lo mismo por menos y, como mínimo, con la misma calidad. Esto implicará optimizar al máximo los recursos empleados en la producción empresarial para conseguir resultados equivalentes mejorando la calidad. Para ello, se debe analizar cada proceso con detalle y mejorar su eficiencia para producir en menos tiempo, con más agilidad, empleando menos energía y, por supuesto, con mayor seguridad y confortabilidad de los trabajadores.
En lo que respecta a la sostenibilidad, y como decíamos anteriormente, toda inversión debe ser por si misma sostenible económica y socialmente, pero si ampliamos el concepto sostenibilidad al entorno del medio ambiente y a la conservación del planeta, esta inversión no debería quedar exenta de la responsabilidad con el entorno en el que vivimos, al que también se deben las organizaciones empresariales. Es por esta razón que probablemente vayamos hacia un escenario en el que los productos y servicios generados mantengan su valor el mayor tiempo posible, minimizando el uso de materias primas, recursos y energía y empleando principalmente materiales sostenibles.
¿Cuál es la principal diferencia entre la Industria 4.0 y la 5.0?
El concepto Industria 4.0 es muy genérico y, desde nuestro punto de vista, gira alrededor de la digitalización en general. Este concepto es tan abstracto que comprende cualquier grado de implantación de nuevas tecnologías en una organización empresarial que ayude a mejorar su productividad y eficiencia, a esto le llamamos también digitalización. Esto abarca, por ejemplo, desde la implantación de un ERP en una empresa de consultoría hasta la implantación de un sistema MES/MOM en un determinado proceso productivo o la introducción de inteligencia artificial, captura y análisis de grandes datos con niveles de conectividad sin precedentes en una industria manufacturera.
En este ámbito, se producirá un gran avance en la inteligencia artificial que estará cada vez mejor dotada para trabajar junto con la inteligencia humana. Con seguridad veremos un incremento de las interacciones entre el humano y la máquina a todos los niveles, desde los procesos de fabricación mediante el empleo de robótica colaborativa inteligente hasta la toma de decisiones empresariales, en las que la informática cognitiva ya estará al nivel de madurez necesario para trabajar junto a la inteligencia humana.